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Hay muchos que desean volver en el tiempo a cuando eran pequeños y pasar tiempo con su papá. Un tiempo de calidad con tu papá recarga las baterías para un nuevo tiempo. A mi mente llegan los recuerdos de mi papá. Cuando me buscaba en la escuela y en la universidad y veníamos todo el camino hasta llegar a casa hablando. Recuerdo que hubo ocasiones en las que me buscaba en la universidad y se sentaba en el salón a esperarme. ¡Qué orgullo sentía de que las personas me vieran con él y me preguntaran quién era! Si me preguntas ¿de qué hablábamos? Pues hablábamos de todo, de los acontecimientos del día, de como iba en las clases, pero lo que nunca olvidaba era preguntarme si estaba sacando tiempo para orar. Como él alimentaba mis fuerzas y mis deseos de ser mejor cada día, un tiempo con tu Padre Celestial hace lo mismo.
En la Biblia se habla de un hombre que caminó con Dios. “Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios.” Génesis 5:24 ¡Qué interesante! Imagínate que te conozcan como Enoc, el hombre que caminó con Dios. Esto me hace reflexionar acerca de la importancia de caminar verdaderamente con Dios, andando como es digno de todo cristiano.
No obstante, ¿qué significa caminar con Dios?, ¿cómo podemos estar seguros de que realmente estamos caminando con Dios? Caminar con Dios es algo más que simplemente compartir con él, es hablar como él, parecerse a él, imitarlo, en fin querer ser como él.
En muchas ocasiones vemos a los hijos que se parecen a sus padres y es algo que en ocasiones es hasta gracioso, pues tengo a mi esposo que se parecía a su papá en muchas cosas, pero también a su mamá en otras. Si hablo de mis hijas, recuerdo que Yadheera cuando era pequeña se aprendía hasta los chistes que su papá decía, incluso personas que la veían en ocasiones solo al verla le dicen: es que me acuerdas a alguien y ese alguien es su papá. Su manera de enseñar o de predicar es un vivo ejemplo de su padre, su forma de ser con la gente, ese don de gente, ese cuidado que siente por los adultos mayores, por el que necesita, pero saben algo, eso no se aprende solo por imitar, se aprende con el ejemplo, con el compartir, con el estar a su lado todo el tiempo. También Yareethza hace muchísimas cosas como él, pero los gestos y ademanes de Yareethza se inclinan más a parecerse a mí. Ahora que Yadheera está más lejos y Yareethza cerca, veo cuanto se parecen a su papá.
El pasar tiempo con la persona que amas te hará ser como él. Pasa tiempo con tu padre celestial y lo conocerás mejor, caminarás como él, hablarás como él, amarás como él. Si me preguntaran ¿qué cosas te gustaría imitar de tus padres? Yo quiero imitar de mi padre terrenal en su integridad, su amor por Dios, su dedicación y entrega a su amado. De mami quiero imitar su entrega a lo que ama, su cerca a comunicación con Dios, su creatividad e incluso su sensibilidad a la palabra.
Sé que hoy te he hecho reflexionar, déjame tu comentario
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