Adornada



                                                            www.soyesposadepastor.com

Cuando era pequeña y alguien se ponía más adornos de la cuenta, le decían: estás más adornada que la puerca de Juan Bobo. Cuenta la historia que un día la mamá de Juan Bobo lo dejó cuidando a la cerdita y se fue a la iglesia. De momento la cerdita comenzó a gruñir y Juan Bobo pensó que también quería ir a la iglesia y fue y la vistió con todo lo que encontró en el closet de su mamá. Por eso la llamaron  “la puerca de Juan Bobo”.


Yo quiero ser adornada de su amor, de su gracia y de su misericordia. Él nos ama tanto, con un amor que no se acaba, un amor eterno, pero de igual nos llena de gracia y misericordia. Aunque me digan que me parezco a la puerca de Juan Bobo, quiero estar adornada de esa gracia, misericordia y amor.


Es importante entender que Dios no es un impulso momentáneo, no depende de las circunstancias, ni de nuestra conducta. Si estamos en comunión con Dios, Él nos seguirá amando, pero si nos hemos alejado y hemos pecado, nos continúa amando, desea perdonarnos y quiere que retornemos, para renovar el pacto de fidelidad. La Biblia dice: “Hace mucho tiempo se me apareció el Señor y me dijo: «Con amor eterno te he amado; por eso te he prolongado mi fidelidad,”Jeremías‬ ‭31‬:‭3‬ ‭NVI‬‬

Entonces su promesa es que Dios nos ama con un amor eterno, incondicional y nos prolonga su misericordia. La misericordia es más que un sentimiento de simpatía, es una práctica. Cuando Dios nos prolonga la vida, nos está extendiendo su misericordia y salvación. Nos está adornando de misericordia. 


En muchas ocasiones nos sentimos tan malos que pensamos que  somos inmerecedores de su misericordia, pero Dios hoy nos recuerda hoy  que su amor, su misericordia y su gracia están siempre disponibles para cuando decidamos aceptarlas. Mi pastor siempre nos recalca: gracia es que nos dan lo que no merecemos y misericordia es que no nos dan lo que merecemos. 


Quiero ser adornada de esas hermosas cualidades. Como el mejor padre que aunque nos regañe por algo tan malo que hayamos hecho, no nos deja de amar, su amor sigue teniendo el mismo efecto,  de ternura y amor. La diferencia es que la misericordia es que Dios no nos castigue como lo merecen nuestros pecados, y gracia es que Dios nos bendiga a pesar de que no lo merezcamos. La misericordia es la liberación del juicio. La gracia es la bondad que se extiende a quienes no la merecen. 


Si hoy reflexionaste sobre “la puerca de Juan Bobo” déjame tu comentario. 

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Gracias a la extensión de su misericordia y salvación, que me prolongó la vida. Dios es bueno, alabo su nombre, mami
Lymaries Jusino ha dicho que…
Aleluya!! Yo quiero seguir siendo adornada de la gracia y misericordia de mi amado Dios🥰🙌🔥
Anónimo ha dicho que…
Muy bueno amada..te bendigo..pastora Janet
Lisy Rios ha dicho que…
Amén, quiero ser adornada de su gracia, su misericordia, su perdón, aleluya!!!
Mirza Berrocales Ruiz ha dicho que…
Bendiciones. Si no fuera por su gracia y misericordia para conmigo no estuviera de pie. 🙏♥️
Anónimo ha dicho que…
Yo me pongo Como la puerca de Juan Bobo Los Domingo porgue yo voy Para Fiesta de un Rey gue me ama y cuida y Para El lo mejor porgue El me tiene un festejo agrees de su palabra SLBM