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“Si Dios puede usar a un hombre sin brazos ni piernas para ser Sus manos y Sus pies, entonces, ciertamente, ¡usará cualquier corazón dispuesto!” –Nick Vujicic
Cuando enfrentamos una situación en la cual sintamos que caminamos y caminamos y no llegamos a ningún lugar, nos sentimos estancados. Sentirse estancado es una señal de que es hora de hacer un cambio. Podría ser un cambio de vida, un cambio de profesión, un cambio en tu perspectiva o un cambio en tus hábitos. Lo importante es que tengas claro lo siguiente: La forma en que estás haciendo las cosas ya no funciona. Hace falta más que una batería al día, una mente enfocada, hace falta un corazón dispuesto.
Hace algunos meses acompañé a mi esposo a casar una pareja al área este de Puerto Rico y teníamos el tiempo contado para llegar a tiempo. Cuando vamos de camino, de momento encontramos muchos carros detenidos por lo que parecía ser un accidente y se formó un estancamiento increíble. Mi esposo se desvió y buscó todos los atajos posibles para llegar a tiempo a la boda. Solo pudo lograrlo porque habíamos planificado el tiempo, y porque él conocía otras rutas alternas.
Cuando nos estancamos en la vida, varias de las cosas que necesitamos para salir adelante son precisamente encontrar rutas alternas y planificar con tiempo. En muchas ocasiones en nuestra vida nos encontramos estancados, ya sea en nuestra vida profesional, matrimonial, social e incluso espiritual. Necesitamos evaluar rutas alternas en ese camino y mirar por qué nos estancamos. Es muy importante evaluar nuestro camino.
“Así dijo Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma.” (Jeremías 6:16)
“El prudente se anticipa al peligro y toma precauciones. El simplón avanza a ciegas y sufre las consecuencias.”(Proverbios 22:3)
¡Qué interesante que el profeta Jeremías nos invita a examinar los caminos, a mirar y preguntar! Y también el escritor de Proverbios nos invita a tomar precauciones ante lo inesperado. Quizás alguien que vivió antes que nosotros y haya caminó por ese camino pueda decirnos donde hay dificultad. Tal vez esa persona pueda aclarar nuestra mente y nos ayude para que no nos estanquemos y que si enfrentamos alguna situación no nos tengamos que detener.
Dios nos llama a ser más cuidadosos caminando en el camino que nos ha tocado transitar. Es un gran reto caminar sin estancarnos, caminar sin devolvernos atrás o sentarnos a esperar que pasen las cosas. Lo importante es que si en algún momento sientes estancarte, puedas evaluar tu camino para encontrar rutas alternas y revisar tu plan de avanzada, y así llegues a tu destino.
Si fuiste bendecido o en algún momento te has sentido estancado, déjame tu comentario y dime ¿cómo como saliste adela re?
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Fanny